“EL CAMINO MÁS FÁCIL Y CÓMODO”
Si saltamos este vital paso, puede ser que no superemos la bebida.
ALCOHÓLICOS ANÓNIMOS, pág. 67
No me sentía muy entusiasmado por la oportunidad de hacerle frente a la persona que yo era, especialmente cuando los dolores de mis días de bebedor se cernían sobre mí como una nube oscura. Desde muy temprano había oído hablar en las reuniones del compañero que no quería dar el Quinto Paso y continuaba viniendo a las reuniones todo tembloroso por los horrores de volver a vivir su pasado. El camino más fácil y cómodo es dar estos Pasos hacia la liberación de nuestra fatal enfermedad y poner nuestra fe en la Comunidad y en nuestro Poder Superior.
Compañeros buenos días soy Armando un enfermo alcohólico adicto, Esto me recuerdan a unas palabras que mi Abuela materna me decía “El flojo y el mezquino dos veces anda el camino”, y que razón tenía, en mi vida pasada hubo gente preocupada por mi, pero mi orgullo convertido en soberbia nunca dejo que se le apoyara ya que mi autosuficiencia se había convertido en mi peor defecto. Inconscientemente sabía lo que pasaría con mi enfermedad, por el alcohólismo de mi Padre se había destruido mi hogar, mi familia y mi personalidad. La verdad es que yo pensaba que no tendría tanto problema con mi enfermedad ya que en ese tiempo era soltero y no tenía ningún compromiso con nadie, que tonto y terco fui al no querer escuchar, cómo poco a poco fui agarrando ese camino fácil y cómodo hacía mi muerte física, mental y espiritual, el abordar el Quinto Paso fue difícil, a quien le gusta sentirse juzgado y hasta cierto punto humillado o exhibido, pero el resultado fue muy placentero por la descarga de emociones que te deja como resultado de tu honradez. Hoy veo a varios de mis compañeros como se resisten a este Paso vital, recuerdo lo duro que fue para mí el hacerlo primeramente en una hacienda y después en una tribuna. Hoy trato de trasmitir esa esperanza que me da el Quinto Paso en mi diario vivir, a veces es difícil darlo por las situaciones que se generan por mis actos y acciones, me producen algunas vergüenza de mi mismo pero al final llega la paz y tranquilidad tan ansiada, espero compañero que tu puedas dar los siguientes Pasos para una sobriedad plena y significativa, recuerda que el miedo es un medidor para salir adelante, no lo conviertas en terror paralizante.
Si saltamos este vital paso, puede ser que no superemos la bebida.
ALCOHÓLICOS ANÓNIMOS, pág. 67
No me sentía muy entusiasmado por la oportunidad de hacerle frente a la persona que yo era, especialmente cuando los dolores de mis días de bebedor se cernían sobre mí como una nube oscura. Desde muy temprano había oído hablar en las reuniones del compañero que no quería dar el Quinto Paso y continuaba viniendo a las reuniones todo tembloroso por los horrores de volver a vivir su pasado. El camino más fácil y cómodo es dar estos Pasos hacia la liberación de nuestra fatal enfermedad y poner nuestra fe en la Comunidad y en nuestro Poder Superior.
Compañeros buenos días soy Armando un enfermo alcohólico adicto, Esto me recuerdan a unas palabras que mi Abuela materna me decía “El flojo y el mezquino dos veces anda el camino”, y que razón tenía, en mi vida pasada hubo gente preocupada por mi, pero mi orgullo convertido en soberbia nunca dejo que se le apoyara ya que mi autosuficiencia se había convertido en mi peor defecto. Inconscientemente sabía lo que pasaría con mi enfermedad, por el alcohólismo de mi Padre se había destruido mi hogar, mi familia y mi personalidad. La verdad es que yo pensaba que no tendría tanto problema con mi enfermedad ya que en ese tiempo era soltero y no tenía ningún compromiso con nadie, que tonto y terco fui al no querer escuchar, cómo poco a poco fui agarrando ese camino fácil y cómodo hacía mi muerte física, mental y espiritual, el abordar el Quinto Paso fue difícil, a quien le gusta sentirse juzgado y hasta cierto punto humillado o exhibido, pero el resultado fue muy placentero por la descarga de emociones que te deja como resultado de tu honradez. Hoy veo a varios de mis compañeros como se resisten a este Paso vital, recuerdo lo duro que fue para mí el hacerlo primeramente en una hacienda y después en una tribuna. Hoy trato de trasmitir esa esperanza que me da el Quinto Paso en mi diario vivir, a veces es difícil darlo por las situaciones que se generan por mis actos y acciones, me producen algunas vergüenza de mi mismo pero al final llega la paz y tranquilidad tan ansiada, espero compañero que tu puedas dar los siguientes Pasos para una sobriedad plena y significativa, recuerda que el miedo es un medidor para salir adelante, no lo conviertas en terror paralizante.
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