14 Mayo 2010 ESTÁ BIEN SER “YO”

ESTÁ BIEN SER “YO”

Una y otra vez los recién llegados han tratado de guardarse ciertos hechos de sus vidas:… se han acogido a ciertos métodos más fáciles… Pero no habían aprendido lo suficiente sobre humildad...

ALCOHÓLICOS ANÓNIMOS, pág. 67-68

Humildad suena mucho a humillación, pero realmente es la habilidad de poder mirarme a mí mismo y aceptar honestamente lo que encuentre. Ya no necesito ser el “más ingenioso” ni el “más tonto” ni ningún “más.” Por fin está bien ser “yo”. Si comparto toda mi vida es más fácil aceptarme a mí mismo. Si no puedo compartir en las reuniones, es mejor que tenga un padrino, alguien con quien yo pueda compartir “ciertos hechos” que pueden llevarme otra vez a beber y a la muerte. Tengo que dar todos los Pasos. Necesito el Quinto Paso para aprender la verdadera humildad. Los métodos más fáciles no funcionan.

• 
  
  Compañeros buenos días soy Armando un enfermo alcohólico adicto, el poder ser yo, me a costado mucho trabajo, ya que en la actividad carecía de una personalidad era un títere más de la sociedad, cuando inicio dentro del Programa de A.A. me deje llevar por la euforia concebida dentro de una hacienda, no quería darme cuenta que era el inicio de un aprendizaje para toda la vida, la verdad es que analizarme día con día me cuesta trabajo ya que en momentos, encuentro justificaciones para ponerme diversas mascaras: santo, buenito, hombre ejemplar etc… Hoy he tratado de ser yo con mis defectos y las pocas virtudes que he podido desarrollar dentro de mi caminar, la Comunidad me ha arropado sin apapachos, exponiendo noche tras noche mi diario vivir es cómo he encontrado esa aceptación que me da la fortaleza para seguir paso a paso el camino hacía la humildad, en ocasiones desde tribuna y otras con mi padrino, pero trato de llevar el ejemplo que mi padrino me ha dado, mucho tiempo tejí mi colchón, pensé que por tener ciertas 24 horas ya me la sabía de todas todas, que fuerte me resulto la caída de mi orgullo y darme cuenta que solo por la gracia de Dios seguía vivo, me la llegue a creer que yo, ya no necesitaba padrino y otras veces busque quien me diera la suavecita, Hoy se quien soy, donde estoy y hacía donde me dirijo, ese camino fácil y cómodo no me resulto, es por eso que me agarro del principio “ATRA VEZ DE REPETIDAS HUMILLACIONES ES COMO PODEMOS VISLUMBRAR LA VERDADERA HUMILDAD”.